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En busca del auténtico donuts. |
El otro día me
propuse hacer unos Donuts como los
de antes, esponjosos y pringosos. Si, esos de reparto diario que se ponían
duros al día siguiente. Rebuscando en la red encontré muchas versiones para
elaborarlos y algunas repuestas sorprendentes al por qué de su proceso de
momificación.
El nuevo siglo nos
privó del fresco del barrio y transformó una fórmula magistral en un adoquín
plastificado y curtido por su
contacto con los fondos de capital riesgo, que compraron la marca y le
cambiaron el glaseado para que pudiera envejecer en las estanterías de los
supermercados.
Pero ahora que he
descubierto que se pueden hacer en casa y congelar para consumir en cualquier
ocasión estoy encantada. Hay quien los hace al horno y quien los fríe –salen
más ricos, pero con más grasa- pero eso sí conviene hacer muchos y congelar
porque el proceso es un poco laborioso aunque fácil, ya que me han salido bien
a mi. La receta está sacada de un blog que explica muy bien los pasos y se
llama Bocados caseros, que a su vez
la ha sacado de otro francés llamado Hervé
Cuisine, cuyo video sobre los donuts tiene más de un millón de visitas, así
que hay mucha gente por ahí fuera haciendo donuts.
Como la masa debe
fermentar varias veces, habrá que reservar unas cuatro horitas para completar
su elaboración. La cobertura se puede hacer con el glaseado tradicional, con
chocolate o con cualquier top que se os ocurra. Y hay muchas fases de la
elaboración donde podrán participar los pequeños de la casa, aparte de
comérselos, claro.
Ingredientes
Masa madre
140 g harina de media
fuerza (se puede mezclar harina de fuerza y floja)
90 g agua tibia (6
cucharadas soperas rasas)
3 g levadura fresca
de panadería
Para la masa definitiva
15 g leche tibia
(una cucharada sopera rasa)
20 g levadura fresca
30 g azúcar
150 g harina media
fuerza
5 g sal (1
cucharadita)
4 yemas de huevo
60 g mantequilla
Aceite de girasol
para freír
Glaseado
100 g azúcar glass
3 cucharadas de agua
Preparación
1. Empezar por la
masa madre disolviendo la levadura en el agua tibia y mezclar en un bol con la harina.
Hacer una bola homogénea y dejar reposar tapada con un paño en un lugar cálido (unos
22ºC). La masa debe doblar su volumen (entre 60 y 90 minutos aproximadamente, dependiendo
de la temperatura ambiente).
2. Disolver la
levadura en la leche tibia y mezclar en un bol con la masa madre y la harina.
Añadirle a continuación el azúcar, las yemas y la sal. Y amasar el conjunto
durante 5 minutos.
3. Ir añadiendo la
mantequilla ablandada hasta conseguir una masa algo pegajosa. Dejarla reposar
hasta que doble su volumen (entre 60 y 90 minutos).
4. Colocar un papel
vegetal enharinado en la encimera y extender sobre él la masa con un grosor de
1 cm o centímetro y medio. Cortar la forma de los donuts con un vaso ancho y el
agujero del centro con un tapón. Los agujeros se pueden conservar pues les
encantarán a los niños. La masa de los recortes se vuelve a amasar para hacer
más donuts. Se cubren con un paño y se dejan reposar en lugar cálido otra hora
para que suban.
5. Mientras, se
puede preparar el glaseado poniendo azúcar glass en un bol y añadiendo agua
poco a poco hasta obtener una consistencia de crema.
6. Una vez que los
donuts han subido pueden hornearse hasta estar dorados o freírse en aceite de
girasol. En éste caso se fríen primero los agujeros de los donuts, si se han
conservado, para controlar la temperatura del aceite. Para que los donuts no
pierdan su forma ni se desinflen es útil recortar el papel vegetal sobre el que
descansan y deslizarlos sobre él hacia la sartén. Una vez dorados por un lado
se les da la vuelta con cuidado.
7. Se sacan sobre
papel absorbente y con un pincel se pintan primero por un lado y una vez seco
el glaseado, por el otro. Se dejan enfriar y se pueden congelar en bolsas para
consumir cuando se quiera. Se descongelan en 30 minutos y están tan ricos como
recién hechos.
Deliciosos los que hiciste, ideal para estos días de invierno con niños.
ResponderEliminarLos voy a hacer,tienen muy buena pinta.
ResponderEliminarMerece la pena. ¡Haz muchos que no te van a durar!
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